Desde que la derecha perdió el poder, no han dejado de conocerse todo tipo de escándalos y abusos cometidos por el PP en los últimos años: caso Camas, escándalo de la Zona Franca de Cádiz, chanchullos urbanísticos en Majadahonda, facturas falsas en Terra Mítica, pagos fraudulentos del IVEX, oscuros tejemanejes entre el PP y la empresa Polaris, las concesiones de licencias de TDT a grupos afines a la derecha Hace unos días, un ex-alto cargo del PP canario ha sido detenido acusado de soborno. Si a estas noticias le añadimos las leyes aprobadas por Aznar que el Constitucional viene anulando, o los críticos informes del Tribunal de Cuentas en torno a la pésima gestión popular de las cuentas públicas, me pregunto si no estaremos asistiendo al final de una ilusión: la que presentaba al PP como un partido honesto y transparente. La moraleja que se me ocurre es que, cuando se ejerce pensando en uno mismo y no en los demás, el poder acaba corrompiendo, sea de izquierdas o de derechas.
Escrito por MUTANDIS a las 13 de Febrero 2006 a las 12:21 PM